“Es vital traer en todas las ambulancias un desfibrilador, es una herramienta que ayuda a salvar vidas; con puras compresiones que se le brinde a una persona que sufre un paro cardiorrespiratorio, es muy difícil que puedan salvarlo”.
De acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-034-SSA3-2013, para la Regulación de los Servicios de Salud en la Atención Médica Prehospitalaria, las ambulancias deben contar con un desfibrilador, aparte de otros implementos y material de curación, lo cual no se cumple con ambulancias incluso de Bomberos y Cruz Roja Mexicana, debido al alto costo del equipo.
El movimiento del corazón, cuando una persona sufre un paro cardiaco es caótico, empieza a temblar, no hay bombeo, sin pulso, se mueve como gelatina y lo más importante es darle una descarga eléctrica con el desfibrilador para pararlo y enseguida continuar con las compresiones.
A una persona que sufre un paro cardiorrespiratorio es muy importante darle las compresiones, pero además, darle descargas eléctricas y en la norma 034 de los Servicios de Salud se encuentra contemplado.
Incluso, como en otros países, es importante tener desfibriladores como si fueran extintores en centros comerciales o donde haya congestionamiento de personas, porque no saben en qué momento se puede ocupar.
Es vital capacitar a la ciudadanía porque una persona que sufre un paro cardiaco, por cada minuto que pasa pierde un 10% de vida; por ello, desde que sucede, los que se encuentran en el lugar deben brindarle compresiones en el pecho para tratar de salvarlo, mientras llega la ambulancia para atenderlo y llevarlo al hospital.
“Son medidas sencillas que la ciudadanía puede hacer, sólo hay que decirles las formas y en el caso del desfibrilador, la máquina sólo va dando las instrucciones y el momento adecuado de darle la descarga.